OPCIÓN A
Entonces
te sentás al sol
y respiras
todas las aventuras
y desventuras
que viviste
hasta que me tuviste
en tus brazos.
OPCIÓN B
Pueda que
mi manera
de quererte
te ponga
incómodo,
te asuste,
te haga reír.
Puede ser
que a su vez
no sepas
como responder
a semejante
avalancha
de palabras
golosas y coquetas,
y todo lo que eso
conlleva.
OPCIÓN C
Y pensar
que cuando
te miro
me parece
que cada día
gusto de vos
un poco mas.
Quién
lo hubiera dicho,
¿no?
OPCIÓN D
Me robaste
todas las palabras
que solía tener,
para convertirlas
en este torbellino
de amor y de todo eso.
Me quedé en silencio,
y los restos
de la que fui
me gritan
que ya era hora.